El equipo de Rubén Barrios buscará la victoria el sábado a domicilio para coger aire de cara al final de temporada

El C.D. Leganés afronta su primera final de la temporada. Tras unas semanas muy congestionadas de partidos con duelos aplazados, el equipo arrastra una dinámica positiva, antes de viajar a Calviá para enfrentarse al rival que ocupa ahora mismo el puesto que ansía el conjunto de Rubén Barrios: la permanencia.

3 puntos separan a mallorquines y leganenses en la clasificación, habiendo jugado los pepineros un partido menos que sus rivales. La acumulación de partidos en las últimas fechas repercute en el cansancio y la energía de los jugadores: “El equipo anímicamente está bien. Esperemos que esa ilusión y esas ganas superen al cansancio”, comenta Rubén Barrios ante esta situación.

Por otro lado, este atasco de encuentros en el último tramo ha repercutido también en la disponibilidad. Lesiones que condicionan la preparación de un encuentro de vital importancia, pero Rubén Barrios no quiere excusas: “Es cierto que arrastramos muchas bajas, en el último partido no pudimos completar la convocatoria y tuvimos un par de lesionados más. Esto complica la posibilidad de convocar doce jugadores, pero todos están trabajando bien y todos tienen ganas de demostrar que pueden aportar al objetivo común del equipo”.

Enfrente estará el Visit Calvià, un equipo con jugadores internacionales en categorías inferiores que demuestra su calidad y nivel en cada partido. “Es un equipo muy intenso, sobre todo en su campo, que te generan mucho en campo abierto y transiciones, con mucho ritmo”, dice el técnico del Leganés, que tratará de subsanar los errores de anteriores partidos y no conceder goles en los primeros minutos.

Una vez disputado este partido, al Leganés le restarán diez duelos para terminar la temporada. Nada será definitorio, pero desde el Leganés esperan marcar un punto de inflexión con una victoria que permitiría al equipo salir de la quema por primera en la temporada.