El Leganés recibe al Valladolid el domingo a las 16:00. Butarque será, una vez más, testigo de un encuentro de necesidad para los pepineros, que no terminan de coger sensaciones positivas en este arranque liguero. «Estamos en una situación peligrosa», reconocía Garitano tras la reciente derrota ante el Fuenlabrada. Las semanas van pasando, los resultados no terminan de llegar, y el técnico es consciente de que «las dificultades cada semana son más grandes».

En frente estará el Real Valladolid, que ha tenido un inicio irregular en su regreso a la categoría de plata. Tras el dramático descenso en la última jornada, que supuso el triunfo del Atlético de Madrid y la pérdida de la categoría para los pucelanos, ahora buscan volver lo antes posible a Primera División. Salió Sergio, tras algo más de tres temporadas al frente del equipo, y llegó al banquillo “Pacheta”, un técnico con experiencia en ascensos y un clásico del fútbol español.

Además, ha podido mantener el bloque de la temporada pasada, aunque sí ha sufrido algunas bajas: la de Marcos André al Valencia, la más sonada. Aún así, también se ha reforzado con jugadores de gran nivel como Sergio León. Weissman es ahora su principal amenaza ofensiva, con tres goles y una asistencia. Se postula como una de las piezas fundamentales de este Valladolid en su camino hacia su objetivo, junto a Toni Villa con dos goles y Roque Mesa con dos asistencias.

“Pacheta” ha afirmado últimamente que el Real Valladolid está en línea ascendente: “Estoy satisfecho con lo que veo, no contento. El equipo compite cada vez mejor. Me gusta lo que veo”, declaró sobre la pérdida de algunos puntos.

En este encuentro, tanto Valladolid como Leganés podrán contar con sus jugadores internacionales tras el no parón de selecciones, algo que han criticado tanto el técnico pucelano como el pepinero. Un partido entre dos equipos con bloques curtidos en Primera División que puede ser clave en la determinación de los objetivos a corto plazo tanto de unos como de otros.