El recortador salmantino Arturo Tapia, que resultó herido el pasado sábado en el concurso de recortes celebrado en La Cubierta, ya se recupera en el Hospital ‘Severo Ochoa’, después de haber sido intervenido de una cornada que, como el propio Tapia ha confesado a la web ‘Cultoro’, “rozó la femoral”.

El percance se produjo cuando Tapia, que esperaba al toro de rodillas sobre la arena del coso leganense, no pudo evitar que el animal le asestara una grave cornada en el muslo. Tras ser llevado a la enfermería, le atendió el doctor Enrique Crespo, que emitió el siguiente parte: “cornada en el Triángulo de Scarpa de 12 centímetros de extensión, que le ha contusionado el paquete femoral, tanto la arteria como la vena, arrancándole una colateral de la vena femoral. La cornada no ha sido muy extensa, pero es una zona muy delicada”.

Una vez recibidas las primeras atenciones en la plaza, el recortador fue trasladado al Hospital ‘Severo Ochoa’, donde fue operado y desde donde explicó a ‘Cultoro’ la gravedad de la herida, destacando que “por fortuna fue una cornada limpia, de 12 centímetros, que tocó el Triángulo de Scarpa, pero ha habido suerte ya que no ha tocado la femoral, aunque la rozó”.

Tapia recuerda, al narrar el percance, que “me venía cambiado de pitón, por lo que intenté marcar el pitón izquierdo, pero vi que lo tenía encima, que no me iba a obedecer, y ya no tuve tiempo de reaccionar. Me llevaron los compañeros enseguida a quirófano y cuando vi al Doctor Crespo allí me tranquilicé bastante; lo conozco y sabía que estaba en buenas manos”.